El 29 de noviembre, a las 8 de la mañana, hemos llegado al puerto de Casteldefels con L’Alliance, tras 24 h de navegación. Han sido las primeras 150 millas del barco que nos costó -hasta a hora- 3 años de trabajo! Y la verdad es que, como estreno, fué muy diferente de como nos lo habíamos imaginado: a pesar de que hubo viento, tuvimos que ir a motor para cumplir con el rodaje; en lugar de gobernar comodamente con la rueda del timón, estuvimos jugando a brazo de hierro con la caña de respeto; en lugar de untarnos de cremas solares y relucir nuestros bañadores, estuvimos cagandonos de frio… O sea, que toda la epicidad triunfal del gran estreno serà para otra vez, de momento nos quedamos con la satisfacción de haber dejado Gruissan de una puñetera vez. También podemos darnos por satisfechos de haber pasado Cap de Creus y el Golf de Rosas en invierno, en la única ventanita metereológica humana entre un fuerza 11 y un fuerza 9…